¿Importa acaso lo más mínimo que esta canción gane o quede la última?
Buenafuente y "Rodolfo" ya han ganado y conseguido su objetivo de ridiculizar Eurovisión por un lado y promocionarse por otro.
Y... al contrario de lo que pueda parecer arriba, me encanta. Ridiculizar Eurovisión es como tirarle una tarta a la cara a un pomposo aristócrata de los que llevan monóculo. Eurovisión no es sino la Europa actual... con treinta años de retraso, simboliza lo peor de nosotros mismos, del europeismo mal entendido.
Por todo ello, me encanta que gane el cinismo, el sarcasmo. Y, si me apuran, el dadaísmo musical. Rodolfo no sólo se rie de España y de nuestras miserias con el Chiki chiki, se rie también de toda Europa. Nada más divertido que leer los comentarios de Youtube sobre la canción diciendo que cómo pueden mandar a Eurovisión una canción en la que una de las bailarinas no se sabe la coreografía y se cae al suelo sin poderse levantar.
Por todo ello, como humillación a aquellos que no son capaces de entender que todo es una gran broma, que la que la bailarina SIEMPRE se cae al suelo y no consigue levantarse, ahí va mi voto a Rodolfo, que se rie de nuestras miserias, nos muestra desnudos y se rie de, pese a lo que nos guste mirárnosla, lo pequeña y sucia que tenemos la polla.
Escrito por fettuchini a las 12 de Marzo 2008 a las 11:54 PMPara un espectáculo patético y dantesco de tiempos pasados, nda mejor que llevar a un artista patético, dantesco y de tiempos pasados.