Ayer todo me salió mal. Nada más levantarme de la cama alguien me golpeó en la cabeza con una barra de hierro y salió huyendo. No es que me doliera mucho pero me incomoda mucho que me traten de asesinar antes de que te hayas podido lavar la cara. En la cocina toda la familia me miraba con aire inocente pero... uno de ellos era el culpable.
Después de comer salí a dar un paseo y tres coches trataron de atropellarme. Dos de ellos lo consiguieron. Sabía que sacarme ese seguro médico iba a ser una buena opción. En le hospital una enferemera con un parche en el ojo inyectó algo raro en mi bolsa de suero y me asusté mucho antes de comenzar a ver arañas correteando por mi cuerpo. Después de eso, claro está, me tranquilicé un tanto.
Esa misma noche un amigo me echó una bronca a su manera porque según él juzgo muy duramente a la gente. Después eché a correr detrás de su coche hasta que me tropecé y me caí de bruces.
Creo que fue el mejor día de mi vida.
Escrito por fettuchini a las 7 de Agosto 2005 a las 12:36 PM